Artista de lo cotidiano

No está muy claro el origen de este apelativo. Si no fui yo, me pasó como al inventor de "Barrio Sésamo", al que entrevistaba siempre la rana Gustavo con gran emoción por su nuevo hallazgo y resultaba que ya estaba inventado. No por ello, era menos genio, porque se le ocurrían mil cosas.

Pues fuese yo la primera o no en pensarlo, si tengo clara la idea, a raíz de la experiencia diaria, de qué es un "artista de lo cotidiano". Si lo tienes de compañero de trabajo, tu espacio laboral está en constante evolución. Lo que sobra de recortar algo, el papel de embalar que ibas a tirar y el bote de pegamento que no encuentras, se convierten en una maceta perfecta y divertida que, por lo menos, no te cargarás por no regarla. Cuándo pensabas que estabas aprovechado al máximo el espacio, resurje una distribución que (¿será por los colores?) hace todo mucho más grande. Y si se te ha echado la Navidad encima y no tuviste tiempo para comprar adornos, algo de forma abstracta que hace que la gente se pare a mirarlo, será el mejor reclamo.

La creatividad que hay de fondo en este día a día, coge cuerpo cuando se enfrenta a un lienzo. Las formas llaman la atención, los colores toman protagonismo y la personalidad (lo que más respeto me provoca del proceso artístico), aflora. Te puede gustar o no, pero no te deja indiferente. Es como su risa, a veces la entiendes y otras no, pero la escuchas y te da que pensar.

Y entramos en un momento que me da mucha alegría. Doble alegría, de hecho. Un amigo, aquél al que la primera vez que hablamos, con 16 años, me dijo que quería ser escritor, presenta su libro, "Historia de Otros". A parte de ser una gran persona, es un buen escritor y ha logrado tras el esfuerzo correspondiente, estar el lunes 11 de junio, de cara a los que queramos asistir, mostrando su saber hacer. Esto es el doble de mi alegría. El "sencillo" es que el "artista de lo cotidiano", a quien conozco de siempre, con quien comparto proyecto laboral que, casi por extensión, se convierte en vital y a quien quiero lo suficiente como para decirle lo que pienso generalmente, sale a la luz, con la verdad por delante. Eso es lo que pinta, así es como entiende el arte, esa es su forma de expresarse y de comprenderle.

Estáis todos invitados, quien prefiera no opinar, también tiene su sitio. Durante unas semanas, algunos de sus cuadros estarán expuestos. Yo ya estoy contenta, por el hecho en si. Y curiosa por saber como irá y cómo reaccionará la gente. Para haceros una idea, podéis visitarlo virtualmente, pero, como todo, en vivo y en directo, gana mucho.

Podía haber novelado un poco el post, y hablar de la intensidad de los colores y de la viveza de los sentimientos que producen y de... pero para mi, está de más, porque lo que más admiro es que desde la normalidad y el querer comunicar, nace este evento.